domingo, 23 de marzo de 2014

poesia 117

Un año un mes, 
un mes una semana,
Un día, una hora, 
un minuto, un segundo,
Apenas un frágil 
instante, nada.
Tras el tiempo 
se esconde la muerte,
Y tras ella nada; 
con ella todo,
Y tras ella 
con todo ¡sola! Acaba.
El gesto vale 
más que la palabra,
Y el imposible más 
que un mañana.
Todo empieza 
y acaba en la nada.
Un suspiro al cielo 
del cual no baja
Se extingue muerto, 
disipado, vano,
En la noche, sin luna 
y sin llama.
Por la calle desierta 
un mundo gris
Avanza lento, 
pero inexorable,
En su marcha. 
Lo tiñe todo oscuro,
Y los muros caen 
llorando desnudos
Su desgracia. 
Noche y gris duermen juntos.
Muerte y nada. 
Polvo y llanto. Cruz,
Cara, cruz, cruz, cruz, 
cruz, cara, cruz y canto;
También la moneda 
se extingue rápida
Sin pausa, 
en tierra de camposanto.
Un instante un segundo 
un minuto
Una hora un día 
una semana un mes
Un año 
¡una vida! Apenas… nada.
Sueño + alma + Dios = muerte = no esperanza.

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