martes, 17 de junio de 2014

poesía nº 107

Nunca pude tener lo que más quise,
ni tal vez una poesía bien hecha,
tantos parados, tanta prostitución
y hambre, y yo triste porque nunca
pude tener lo que quise. Te quise
a ti y no te tuve porque no pude,
no me dejaste, ¡Cómo te escapaste!
corriendo veloz cual lluvia
en una tormenta. Corriste tanto
que no te alcancé. Vete corriendo,
si este es tu deseo, que ya no
te necesito, conmigo a solas tengo
bastante, así nadie me contradice.
Tengo un bastón con alas de color
azul, blanco, rojo, que visita a mi tío
después de cenar pavo asado,
¡Es tan educado! Se limpia con servilleta
y vota en blanco, para reírse
un poco de los políticos.
Una vez tuve un horno y quise
ser panadero; después se me pasó
la tontería. ¡Corre tanto el tiempo
y tan poco nuestra inteligencia!
Al final le saca tanta ventaja
que nos morimos alegremente.
Da igual que sea en una guerra,
en un accidente de tráfico,
haciendo el amor o en el retrete,
te mueres y te jodes, sin más,

después haz lo que tú quieras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario