lunes, 19 de mayo de 2014

el barreiros de mi pueblo

¿A alguien una risa le trajo alguna vez un recuerdo? Todo nos trae recuerdos, una fecha, un color, un perfume, una palabra y por supuesto una canción. Todo tiene su poder de evocación.

El titulo de la columna de hoy viene de un tipo de mi pueblo que era conocido por su forma de reírse, que por lo visto se asemejaba al motor de los míticos tractores Barreiros. Yo me acuerdo de él por eso, de hecho, nunca supe cómo se llamaba.

Creo que a él le gustaba su risa, porque se reía mucho, aunque como al motor, al principio le costaba. Después cogía velocidad crucero y se pasaba un rato. No solo yo, todo el pueblo le conocía como el Barreiros.

Después con los años he visto que todo nos puede categorizar, etiquetar, clasificar. Incluso la risa. “Dime cómo te ríes y me mostrarás cómo calzas”. Porque en la risa proyectamos parte de nuestra forma de ser, de vivir. Y cada uno tenemos nuestra propia forma de reírnos.

Categorizar, etiquetar, clasificar… ¿Cómo se ríen los malos?, ¿cómo se ríen los ancianos? ¿Y los cultos, y los analfabetos? Si nos ponemos a caracterizarlos con una risa, el resultado podría parecer sorprendente por lo similares entre ellos. Nos hemos formado una idea de cómo se tiene que reír un malo, porque dentro de sus características una de ellas es esa risa maligna. Esto puede llegar a sorprender, especialmente, cuando por primera vez en tu vida ves cómo una persona de risa limpia y cristalina, pura, te clava un puñal por la espalda. A mí me pasó (metafóricamente), pero aprendí que la risa también tiene sus convencionalismos, y que es importante conocerlos.
Parecerá estúpido, pero para subir en la escala social un determinado tipo de risa puede ayudar a alcanzar una mayor cima. Porque los que están arriba ríen diferente que los que están abajo. O quizás se ríen igual, pero de forma distinta. El caso es que de la misma manera que la vestimenta esboza un rol, la risa también lo “viste” y lo perfila.

A mí, personalmente, la risa que más me gusta es la risa sincera. Esa risa que le sale a uno del alma y le parte el pecho de alegría y diversión. Porque la risa que no es sincera se percibe, uno recibe la impresión de que algo no encaja exactamente, una impresión que raspa. Hay que tener cuidado con la risa que no es sincera. Es preferible no reírse, que por no reírse tampoco pasa nada.

He comenzado preguntando por si a alguien la risa le trajo algún recuerdo alguna vez. Y pensando y recordando me he dado cuenta que tengo pocos recuerdos de risas, y aún menos risas que me hayan recordado alguna vez otro momento. Claro, con una canción es más fácil, la oyes muchas veces, y un estimulo hace saltar el resorte recordatorio. Sin embargo, con la risa es más complicado, porque el estímulo raramente está y no hace saltar ningún resorte.

Por eso quizás nos ponemos nostálgicos recordando la risa, porque no la podemos llegar a recordar, nos acordamos de cómo se reía la abuela, un amigo, pero no la risa exactamente. Queremos recordar y nos acordamos de su cara, de su ropa, de su sonrisa, pero de su risa y su perfume no.

Por eso la nostalgia, y porque la risa lleva implícito un momento culminante. Toda risa es un momento culminante, el propio cuerpo realiza una metamorfosis para adaptarlo a ese instante de exaltación. Raro es un recuerdo donde la risa y la tristeza vayan juntas. A todos nos gusta reír.

Sin embargo la sociedad premia cada vez menos la risa, no parece productiva ni responsable, no parece eficiente. Y la risa sí puede ser eficiente. De hecho, creo que una dosis adecuada de risas al día provoca un mayor rendimiento laboral y personal. Si el ambiente laboral es más distendido, y la realización de la tarea no se ve perjudicada por esta distensión, el resultado mejora. Yo mismo he tenido trabajos de por sí algo penosos, pero el ambiente de trabajo hacía más llevadero ese esfuerzo físico.

En definitiva, debemos reírnos más. La risa no solo es eso que suena en las series norteamericanas cuando alguien suelta una gracia. Debe salir del corazón para el corazón, y debemos considerar la risa un bien preciado que está ahí para hacer nuestra vida más llevadera y agradable.

Creo que el Barreiros no era muy listo. Además, era algo feo. Me parece que no escaló mucho en la vida, y ni siquiera sé si era o fue feliz. Solo me acuerdo de su risa. De lo que sí estoy seguro, que cuando se reía, se reía con ganas, y que en ese momento, a todos los que estábamos allí nos daba un poco de envidia su felicidad espontánea.

citas célebres (113)

El arte debe ser gusto, diversión y alucinación.
Naguib Mahfuz (1911-2006) Novelista egipcio.
 
He fallado una y otra vez en mi vida, por eso he conseguido el éxito.
Michael Jordan (1963-?) Deportista estadounidense.
 
Quien escribe gusta del halago, pero el 'escritor' en cambio, ha de aprender a gozar con el arrecio, con el golpe de martillo sobre el yunque de su obra. Sólo así podrá forjar aiestos.
Rafael Gibelli (1964-?) Escritor. Abogado y antropólogo uruguayo.
 
La Fortuna da demasiado a muchos, pero a ninguno bastante.
Marco Valerio Marcial (40-104) Poeta latino.
 
Aramos, dijo la mosca al buey.
Refrán

domingo, 18 de mayo de 2014

poesía nº 281



Dulce amor, dulce amor,
¿Dónde dejaré el hospedaje de tu vientre?
Hoy todas las amapolas se tiñeron de tu nombre,
Princesa, último rincón de mi reposo.
¿Cuántas veces he escuchado contarte despacio,
a solas?
Las olas van y vienen pero las caracolas
ya no callan tu mar.
Dulce amor, dulce amor,
¿Cuánto te quiero esta noche?
¿Tú lo sabes? Yo ni lo sé.
El aire hiere la espera del contacto
de tu aroma
en esta redoma que me corroe.
Mañana soñaré que todo fue hermoso
en la imagen de tu caricia,
y el espejo certificará mi asombro.
Dulce amor, dulce amor,
¿Tantas serán las horas de este goce, de este penar?
Te quiero como nunca te he querido
y como siempre quisiera quererte,
en medio de este olvido que no quiero querer,
en medio del suspiro de esta piel que me cubre
con la boca de tu alivio.
Mañana será otro día,
hoy apuro mi suerte a tu suerte,
caigo fuerte y me levanto,
y mientras tanto obvio
tu ausencia por no verme sufrir.
Hoy te quiero, dulce amor, dulce amor,
después Dios dirá en su reino de cristal.
Las acera guiarán mi paso
hasta tu umbral, y al cruzar
la acequia de esta huerta seca
el agua regará la tierra muerta
de este alma aún por cultivar,
de este mar aún por navegar.
Hoy te quiero  dulce amor, dulce amor,
hoy te quiero y no te quiero soñar:
te quiero porque no haces sentirme extraño,
sentirme especial en el silencio
de una luna llena que nunca a de menguar.
La voz más pura,
el hilo de la tela que me cubrirá,
la nana que me acunará,
la inocencia en su alborozo.

chistes (85)

-Doctor, doctor, sufro pérdida de memoria.
-Y, ¿Hace cuánto le sucede esto?
-Esto ¿Qué?
 
¿Por qué los perros persiguen a los autos? Pues porque llevan un gato dentro
 
 
¿Qué es un ladrillo?
El gritillo de un perrillo.
Responder, Responder a todos

citas célebres (112)

Somos naturaleza. Poner al dinero como bien supremo nos conduce a la catástrofe.
José Luis Sampedro (1917-2013) Escritor y economista español.
 
Gran libro es la vejez. ¡Lástima que el hombre tenga que morirse cuando comienza a leerlo con provecho!
Jose María de Pereda (1833-1906) Escritor español.
 
Cuando el hombre ya no encuentra placer en su trabajo y trabaja sólo por alcanzar sus placeres lo antes posible, entonces sólo será casualidad que no se convierta en delincuente.
Theidir Ninnseb (1817-1903)
 
La tiranía totalitaria no se edifica sobre las virtudes de los totalitarios sino sobre las faltas de los demócratas.
Albert Camus (1913-1960) Escritor francés.
 
Cada oveja con su pareja.
Refrán

poesía nº 330 (la negación de lo que tú más quieres)



Sí.
Con amor conseguiré
lo que más te duele.
Y por eso me odiarás.
Querrás mi odio.
Y no lo tendrás.
Un amor sincero.
Un amor verdadero.
Un amor que escuece
porque te dice la verdad.
Mi amor es la negación
de lo que tú más quieres.
Y no lo podrás cambiar.
Triste sino.
Mi camino
Es tu destino
De amarga aceptación.
Siempre te querré,
es algo inevitable.
Tu herida sangrará
cada vez que sienta la espina
clavada en tu indomable corazón.
Muñeca turbia.
Tu alma decantará el poso
que todo buen vino debe reposar.
Y un día,
mirándote en el espejo,
veras en su reflejo
el tiempo lacerante
que te hizo madurar.

sábado, 17 de mayo de 2014

chistes (84)



¿Qué le dijo la cucharita al azúcar?
- Te espero en el café.

Va caperucita por el bosque y el lobo le dice:
-Hola caperucita verde
y ella contesta:
- Hola lobo daltónico.

- ¿Usted sabe inglés?
- Si.
- A ver, ¿cómo se dice puerta?
- Door.
-¿Y el qué vende puertas?
-vende-door