... y
te perdiste, eran demasiados para no equivocarse. Además, creo que lo ponía en
algún sitio. No sé por qué tenías el empeño de saber cuántos escalones había en
la torre Eiffel, hay los que y ya está, no hay por qué darle más vueltas. Fue
cuando estuvimos la segunda vez. Recuerdo lo que estaba diciendo... ojala no lo
hubiese dicho nunca; es una tontería, ya lo sé, pero no me gusta pensar que lo
dije, sobre todo por esto... lo del entierro, claro... nunca pensé que pudiese
suceder realmente, y menos a ti. No me explico cómo coño has podido llegar a
esto, cómo has podido llegar a esto, cómo ha podido suceder, ahora que parecía
que todo te iba bien, con tus exposiciones y con Jean Paul, que pensaba que te
conocía bastante, pero ya veo que me equivocaba. Uno es perfecto...
Estos
dos querían venir, pero yo les he dicho que no hacía falta, que no era
necesario. He tenido suerte, fue por casualidad y ya llevo con ellos más de año
y medio. Es cierto que a veces uno querría tener una casa para sí mismo, pero vivir
solo tiene que ser triste. Además el dinero no llega para tanto. Con dos o tres
años más y esperando que me suban el sueldo yo creo que quizá pueda pillarme
uno; por otra parte tampoco me apetece mucho, por lo menos hasta que no me eche
un novia algo formal para ir a vivir con ella, y francamente, después de lo de
Silvia el horno no está para bollos.
...biblioteca. Fue una pena que se fuera era
un buen chaval. Ya no es igual, a veces le escribo, pero no es lo mismo. Boni
era un colega de puta madre. Pensé que con él sería distinto, pero la distancia
no sabe de colores... quizás no fuésemos tan amigos, aunque no lo creo. Todas
las juergas, todos los momentos, tantas cosas. Supongo que una buena amistad
olvidada se puede recuperar. Un día de estos le escribo una carta para quedar
un fin de semana e irnos por ahí. Me acuerdo
que muchas veces hablaba de mierda, mierda por todos los sitios, de la
filosofía del cagar y todo eso. Quiso comerse el mundo y el mundo le ha comido
a él. Por lo menos ahora tendrá tiempo para leer. Haría buena pareja con
Ekaitz; en la cara B se vive más tranquilo, supongo.
Contigo las cosas eran distintas, es difícil
encontrar a alguien que te sepa hablar, y sobre todo escuchar a la vez. Siempre
he tenido la irreprimible necesidad de sentirme rodeado de amor, porque siempre
he creído que iba solo. Por eso las cosas eran distintas contigo, cuando hacía
falta tú estabas ahí, detrás mío. Hoy no y eso es algo que no te perdonaré en
mucho tiempo, o nunca. Un amigo no le hace estas putadas a otro. Y tú y yo
éramos amigos, ¿no? Aquí, dentro de éste coche hay demasiado espacio, espacio
vacío y la música se queda escasa para llenar tanto hueco. Las canciones
parecen haberse quedado pequeñas, o enormes porque a veces pesan demasiado. Las
mismas canciones donde te escondías. Te ibas y luego era como si no encontraras
el camino de vuelta, porque te pasabas horas sin volver...
...un
buen polvo, porque uno tiene sus necesidades. Del último ya ni me acuerdo.
Desde lo de Silvia a dos velas. Sé que no me costaría demasiado encontrar un
rollo para una noche, pero sinceramente no estoy por la labor de tener que
hacer el estúpido y sonreír sólo para acostarme con una tía que ni siquiera me
importa. Y yo que pensaba que la etapa de la masturbación ya había pasado. Por
lo visto es algo a lo que se vuelve siempre. Es mejor cuando te las hacen, eso
está claro... Paula. Como la pille... Le tengo unas ganas increíbles. Y creo
que ella lo sabe. Ellas saben esas cosas en seguida y les gusta jugar un poco.
Pero como la pille... El otro día le invité a un café, así, como quien no
quiere la cosa, pero ya ves, que si tenía mucho trabajo o no sé qué... Eso me
dijo, la muy zorra. Siempre con su maldito ordenador. Trabajar, trabajar,
trabajar... Con un poco de suerte hasta es virgen todavía. Si hay algo que me
jode es que una tía me diga que no a ciertas cosas. Que le den por culo, ella
se lo pierde. Hay muchas más esperándome ahí fuera... Contigo la cosa fue distinta.
Nunca te lo dije, pero contigo fueron los mejores polvos que he echado.
Entonces follar si que era un arte. Con las otras no es que estuviese mal, pero
yo creo que lo tuyo era un don innato. Y anda que el Jean Paul no se habrá
puesto las botas, que si no es que es bobo.
...estar cerca de ti. Saber cómo estabas
realmente. Nunca pensé que en dos meses pudieses caer tanto, si hasta me
dijiste que todo estaba olvidado. Con lo feliz que parecías con Jean Paul. Y lo
de la exposición que ibas a hacer en otoño, que tanta ilusión te hacía... todo
a la mierda. Tú, la que siempre hablaba del futuro, muerta por sobredosis,
tirada en el baño. Vive deprisa, muere joven y tendrás un hermoso cadáver. Qué
le jodan a todo. ¿Y tu madre? ¿Y tu padre? ¿Y yo? ¿Tan mal estaban las cosas
como para hacernos esto, para hacerte esto? Cuando Teresa me ha dicho lo que te
metiste me he asustado... Hasta un caballo la hubiese palmado. ¡Joder tía! No
lo entiendo. Tú, precisamente tú, podría haber sido otro, pero has tenido que
ser tú. Ya no me enseñarás a pintar, y mira que me lo prometiste la última vez.
Por lo menos me quedarán tus cuadros. Ya no sé si veré tus cuadros o a ti en
ellos... Quizás al final sea todo lo mismo. Blanca y bajo tierra. Eres
demasiado joven para eso. Siempre te quejabas de que dormías sola, por lo menos
ahora tendrás cerca a tu estrella de rock...
Necesito volar. Hoy más que nunca. Volar
cruzando, no sé qué, sólo cruzar algo. El mundo está cerca, seguro, ahí fuera,
a dos pasos. Te lo juro, uno acaba harto del trabajo y de la ciudad y del
retrete y de sentirse solo y de los cementerios. Al fin y al cabo creo que todo
es parecido. Estoy harto de las paredes y de la carretera y de las agujas de
los relojes, pero sobre todo estoy harto de los fantasmas que han asustado a
Silvia y de mí por no matarlos y de Patricia por darles de comer, por no
haberme olvidado de ella después de tantos años, por ser yo tan idiota,
joder...
El
cigarrillo acaba consumiéndose en el cenicero, ausente, absorto. La frontera ha
quedado atrás no hace mucho, al final de las ruedas. La autopista inmensa, más
inmensa que la noche, medita los kilómetros. El coche se ha parado en un área
de servicio y el sueño, acumulado durante horas, es más fuerte que los
párpados. Alguien recuesta la cabeza y se dice "hasta luego".