sábado, 24 de mayo de 2014

chistes (90)

-Doctor, ¿usted cree que mi marido va a perder el ojo?
Uhhh…  yo no lo sé, yo se lo he metido en el bolsillo…
 
 
¿Por qué los hombres llevan corbata?
Porque es más elegante que llevar correa.
 
 
Se abre el telón y se ve a una mujer que va a una peluquería pero está cerrada. ¿Cómo se llama la película?
¡Ah! te rizas como puedas…

poesía nº 144



Siempre fuiste cenicienta
a las doce de la noche;
el zapato no fue tuyo
ni la calabaza un coche.
No hubo príncipes que te
despertasen con un beso,
ni enanos que te cantasen;
nunca hubo nada de eso.
El lobo te comió
destrozándote la casa,
el ladrillo era cartón
y la madera era paja.
Tu vida fue una fábula,
un cuento mal contado.
Tuviste un error: nacer
en el lado equivocado.

viernes, 23 de mayo de 2014

citas célebres (116)




El único antídoto para el fanatismo es el sentido del humor.

Amos Oz (1939- ) Escritor israelí.

Para los historiadores, los príncipes y los generales son genios; para los soldados siempre son unos cobardes.
Leon Tolstoi (1828-1910) Escritor ruso.

Mira dos veces para ver lo justo. No mires más que una vez para ver lo bello.
Henry F. Amiel (1821-1881) Escritor suizo.

Cada cosa tiene su belleza, pero no todos pueden verla.
Confucio (551 AC-478 AC) Filósofo chino.

Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas.
Miguel de Cervantes (1547-1616) Escritor español.

chistes (89)

- Cariño, ¿estás resfriado?
- Do
 
 
Un marica que llega a una charcutería pidiendo un chorizo. El charcutero le pregunta:
- ¿Se lo parto en rodajas?
- ¿Tú que te crees, que mi culo es una hucha?
 
 
Se abre el telón y aparece un tío comiendo golosinas y encima de una especie de ovejas-ponyes.
Se cierra el telón como se llama la película.
El goloso en llamas.

mundo serio

Hoy he llegado a una duda, a ver si ustedes me la pueden resolver: Si el mundo parece tan poco serio ¿por qué hay tan pocas sonrisas? Decir que esto se me ha ocurrido viendo un telediario y unos anuncios de publicidad que había por medio. A veces me cuesta diferenciar lo uno de lo otro, y entonces surgen hermosas sinergias donde lo real y la publicidad se yuxtaponen en mi percepción. También tengo que decir que en el telediario estaba viendo la situación política del país y de publicidad una línea nueva de ropa de unos grandes almacenes.

Como comprenderán y compartirán, la situación actual es preocupante… ¿Por qué no sonríen las modelos en la tele…? Aunque algunos piensen que no, son portadoras de muchos valores y modelos hacia nuestra juventud, e incluso infancia. Como los políticos. Y claro, entre eso y los políticos (porque a veces no te das cuenta de que han terminado los anuncios y crees que la noticia es también un anuncio) se me hace un batiburrillo mental. Donde mejor los diferencio es en la sonrisa, los políticos sonríen más que las modelos. De hecho suelen sonreír bastante. En eso ofrecen un buen ejemplo a la ciudadanía. Por otra parte, las modelos no sonríen, y parecen princesas sin sentimientos.

No quiero vivir en un mundo donde la gente no sonría. En una democracia, la gente debería de sonreír más. ¿Por qué no lo hace? ¿Acaso esta democracia no nos anima a sonreír más? Creo firmemente que es uno de los mejores sistemas de gobierno que se han creado, que bien implantado debe proporcionar una mayor cantidad de felicidad. Y quien es feliz sonríe.

A mí me gustan las princesas con sentimientos. Ir por la calle y ver a los chavales alegres, no todo estirados como si los sacasen precisamente de los anuncios. Que es posible, que yo no entiendo mucho de estas cosas, que un jersey o una camisa luzca mejor porque estas más serio que un palo seco, pero yo cuando me pongo la camisa y me miro al espejo con una sonrisa, me veo más guapo. Y a los demás también los veo más guapos.

Otro aspecto fundamental, y que quizás mucha gente no sepa, es que nuestras emociones encauzan nuestras posturas corporales, y a la inversa, la postura o gesto que realizamos puede influir en nuestras emociones. Si tú te obligas a sonreír, el mensaje que se transmite al cerebro desde nuestro cuerpo es que estás en un estado positivo, y eso lo incentiva a una sensación de mayor bienestar.

A mí esto me consuela bastante. Saber que si no tengo el mejor día puedo, mediante un pequeño esfuerzo sonriendo, mejorar mi carácter, me anima. Saber que yo tengo una parte del control de la situación me reconforta. Así que ya puede ser un día de mierda, que es difícil que pierda la sonrisa. Mi equilibrio mental me lo agradece.

También he considerado la posibilidad de que no sea una cuestión de emocionalidad, sino de estética. Sin entrar en disquisiciones acerca del concepto de estética… ¿Es más estética una persona que no sonríe? ¿Queda mejor? Ya he mencionado antes que de esto no entiendo mucho y quisiera que alguien me lo resolviera.

El telediario al final ha terminado. Yo me he quedado pensativo (un telediario visto con atención te deja pensativo). ¿Son estos los valores que queremos transmitir a nuestros hijos? ¿Éstas son las noticias que queremos que se vean dentro de 25 años? ¿Y estos los anuncios?

Vivimos en un mundo muy serio que se está tomando a broma. Nosotros, en nuestra infinita acumulación de conocimiento, que no sé si de sabiduría, nos estamos volviendo como el agua pura, incoloros e insípidos. Un mundo muy serio que confunde la forma con el fondo, donde los valores internos se intercambian por los valores externos. Yo quiero ver personas, no maniquíes, y esto vale para mucho tipo de personas y profesiones.

Nunca suelo pedir regalos, porque eso no se pide, se da. No obstante, por esta vez y sin que sirva de precedente yo os pediré un regalo, que me hagáis un regalo. Y el regalo es vuestra sonrisa. Regaladme una sonrisa, aunque solo sea una, aunque solo sea porque os he intentado hacer sonreír…
¡Dadme un caballo con el que cabalgar y conquistaré todos los castillos!

miércoles, 21 de mayo de 2014

poesía nº 120 (escena III)



Un ojo. Otro ojo. Pelo.
Una boca. La almohada.
Un día pasado, no
muy lejos, de noche clara,
las estrellas por testigos
sus ojos en ellos clavan.
Unos labios cerca sueños
murmuran y besos claman.
Se gira y mira el techo.
La lámpara allí, la cama
aquí. Al final se besan.
Sus recuerdos le acompañan
en su insomnio cada noche.
El corazón fuerte llama
en el pecho al amor
de aquella antigua amada
que una vez estuvo entre
sus brazos. Fuerte la llama
en el pecho arde aún;
no se extingue, no se acaba.
Sudor tras el escenario.
Recuerdo. Sudor. La sábana
húmeda por el sudor
se encuentra. Sudor. La almohada
por la lágrima furtiva
también se encuentra mojada.
-¿Nunca has llorado, pequeño?-
Pregunta – Él solo calla
y llora. Sus labios buscan
labios que besar ¿La amas
todavía? ¡No! Sí… un
poquito solo…¡La amas!
-¿Nunca has llorado, pequeño?-
Pregunta su blanca almohada.
El llora y calla. El mar.
Un bar. Un aula. Ventanas.
Una pizarra que verde
espera. Arena y playa.
Un árbol caído. Risas.
Una tienda de campaña.
Sol. Azul el cielo arriba.
Aquí abajo la cama.
Vagas por la hermosa hierba.
Noche. Oscuridad. Tu alma.
La rodeas con tus brazos.
Destila amor su mirada.
Tu sonríes. Ella se esfuma
y desaparece rápida.
De espaldas al techo estás,
destapado y sin tu sábana
blanca. Tu soledad negra
ahora es tu guardiana,
y tus lamentos amargos
la fruta de su mañana.
Te quiere, no te abandona.
Aplausos. Muchos. Muchachas.
Muchas.  Admiración ciega.
Pasión. ¡Éxtasis! Tu almohada…
Su melena acaricia
la ansiosa piel de tu cara.
Es posible que cabalgues
solo, muchacho, sin capa
que te cubra de ese sol
que no quema, que abrasa.
Ella tal vez te quiera
todavía. La esperanza
no muere perdida y sola
nunca. Esperará a tu alma.
Te besa. Te besa. Sueña
que eres feliz y descansa,
duérmete. Seguro que otro
día nacerá mañana.

martes, 20 de mayo de 2014

citas célebres (115)




Es mejor viajar lleno de esperanza que llegar.

Si ayudo a una sola persona a tener esperanza, no habré vivido en vano.
Martin Luther King (1929-1968) Religioso estadounidense.

Inscribe los agravios en el polvo, las palabras de bien inscríbelas en el mármol.
Benjamin Franklin (1706-1790) Estadista y científico estadounidense.

Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas.
Miguel de Cervantes (1547-1616) Escritor español.

Para la mayoría de los hombres la guerra es el fin de la soledad. Para mi es la soledad infinita.
Albert Camus (1913-1960) Escritor francés.